Dónde estás ?
La noche empieza a dibujar mi soledad.
Una luz rezagada entró a mi cuarto
quebró mi olvido y dibujó tu silueta...
Dónde estás?
Es tan inmenso el océano que te oculta ?
Trae una historia asfixiada el oleaje de ultramar?
Dónde naufragó tu duende que habitó mis labios?
En qué misteriosa playa inaccesible
se guarece tu mirada angelical ?
Por recobrar tus cristales de sol
se escaparon de mis manos los silencios,
y me interné donde los sueños se extravían,
y los ecos mueren sin respuesta.
Me estremecí al encontrar en el fondo de la vida
el abismo brutal donde yacen las esperanzas ,
donde habitan las nostalgías hacinadas
y los rencores, tozudamente agónicos
amarrados con anclas invisibles
al fango de la nada...
Y aunque sé que el amor también naufraga
como una nave herida en alta mar
te seguiré buscando en mis fantasmas,
a pesar que la lluvia huraña del desdén
intente en vano anegar este valle,
hoy prisionero de mis delirios...
Y aunque mis ángeles interiores pretendan ignorar tu recuerdo
yo beberé gota a gota toda mi noche
hasta sentir rebalsar de ausencia con el día,
mi alma que te llama...
.
Todavía me hieres dulcemente...
La noche empieza a dibujar mi soledad.
Una luz rezagada entró a mi cuarto
quebró mi olvido y dibujó tu silueta...
Dónde estás?
Es tan inmenso el océano que te oculta ?
Trae una historia asfixiada el oleaje de ultramar?
Dónde naufragó tu duende que habitó mis labios?
En qué misteriosa playa inaccesible
se guarece tu mirada angelical ?
Por recobrar tus cristales de sol
se escaparon de mis manos los silencios,
y me interné donde los sueños se extravían,
y los ecos mueren sin respuesta.
Me estremecí al encontrar en el fondo de la vida
el abismo brutal donde yacen las esperanzas ,
donde habitan las nostalgías hacinadas
y los rencores, tozudamente agónicos
amarrados con anclas invisibles
al fango de la nada...
Y aunque sé que el amor también naufraga
como una nave herida en alta mar
te seguiré buscando en mis fantasmas,
a pesar que la lluvia huraña del desdén
intente en vano anegar este valle,
hoy prisionero de mis delirios...
Y aunque mis ángeles interiores pretendan ignorar tu recuerdo
yo beberé gota a gota toda mi noche
hasta sentir rebalsar de ausencia con el día,
mi alma que te llama...
.
Todavía me hieres dulcemente...
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